Otro golpe político más para Álvaro Ruelas Echave, quien por enésima vez no logra conquistar la silla de la dirigencia estatal del PRI en Sinaloa.
Le faltó ‘padrino’ a Ruelas, pese a tener la presunción por el orgullo de ser un prísta de cepa recalcitrante con poses y posturas arrogantes, falto de humildad, actitudes que en nada le favorecen a lo que le queda de vida al instituto en Sinaloa, que se debate entre la vida y la muerte ya que se encuentra en etapa terminal de su existencia.
Lo que es un hecho es que en los próximos ‘dos, tres’ días, máxime una semana, en la urgente necesidad de resucitar de inmediato la actual dirigencia para renovar estrategias y “fortalecer” al partido –salvarle la vida-, se tome la decisión de nombrar a una mujer en la dirigencia de este organismo político, en razón de que no existen las condiciones para que alguno de los que aspiran la dirigencia estatal lo pueda lograr, que aunque se tenga trayectoria y trabajo político, no ha sido suficiente para llegar a la dirigencia priísta.
Todo es consecuencia del capricho de Mario Zamora Gastélum, quien aferrado a su “gallo”, Álvaro Ruelas; como el mejor candidato a la dirigencia estatal del partido y hasta casi forzar para otorgarle este cargo, hecho que solo quedará como un anhelo incumplido; y mucho menos el decir “hasta otras pizcas”, porque por más que se aferre a la vida, al tricolor casi se lo “carga el payaso” y no creemos que haya qué dirigir a la vuelta de unos años.
El actuar de arrogancia y revanchismo del senador de la república, Zamora Gastélum; ha generado se vean desbandadas de lo poco que queda de militancia del PRI en Sinaloa, muchos por no estar de acuerdo con imposiciones de dirigencia del mismo otros para no ‘hundirse con el barco’.