El niño que realizó la tragedia en su colegio Cervantes de Torreón, matando a su maestra, disparando a sus comoañeros para al final suicidarse, se descubre que su familia está ligada al negocio de Metafetaminas. La Inteligencia Financiera (UIF) congeló las cuentas bancarias por 100 millones de pesos del padre y del abuelo.
“Se encontró algún tipo de actividad irregular en cuanto al flujo de efectivo a sus cuentas y a empresas vinculadas con él, y transferencias internacionales a Estados Unidos, eso ha motivado, la necesidad de verificar el origen lícito de los recursos”, expresó el funcionario federal.
Según las investigaciones, las cuentas bancarias ascienden a más de 100 millones de pesos y aunque en un principio se había establecido que la familia del menor se dedicaba a organizar banquetes, ayer un informante señaló que el padre y el abuelo del menor podrían tener nexos con un grupo de la delincuencia organizada. El padre del niño, identificado como José Ángel “N”, fue detenido por la DEA en Estados Unidos, hace unos cuatro años, por tráfico de metanfetaminas, pero recuperó su libertad a finales de octubre pasado, para luego ser deportado a México.