Esta inversión marcará un antes y un después en el proceso de producción de alimentos y en la industrialización de Sinaloa: César Enrique Galaviz Lugo
Con una inversión inicial de 1 mil 250 millones de dólares, que escalará hasta alcanzar los 5 mil millones de dólares, la planta de GPO en Topolobampo fortalecerá las cadenas de valor del campo mexicano, abastecerá gran parte del mercado nacional de fertilizantes, al tiempo que generará un gran impulso al desarrollo industrial de Sinaloa.
El presidente de la Asociación de Agricultores del Río Fuerte Sur (AARFS), César Enrique Galaviz Lugo, consideró que esta inversión marcará un antes y un después en el proceso de producción de alimentos, pero también en el plan de industrialización que promueve el gobierno de Sinaloa, avalado por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El dirigente agrícola reconoció que con la planta de fertilizantes se logrará un impulso sin precedentes al campo sinaloense, sólo comparable con la llegada de la mecanización y la tecnificación del campo, que permitió dar un salto cualitativo en la producción de alimentos.
Estamos hoy ante el umbral de una nueva era para el campo, no sólo de Sinaloa, sino de todo el país, puesto que garantizar el abasto suficiente y oportuno de los fertilizantes, que necesariamente llegará a mejores precios al productor, sienta las bases para lograr una mayor rentabilidad en el agro.
Asimismo, dijo, se reducirán los altos niveles de incertidumbre que acompañan al proceso de producción agrícola, y que temporada tras temporada pone a temblar a los hombres del campo por los altos costos de producción, generados por la fluctuación en la que se mueven los precios de los fertilizantes.
El presidente de la AARFS recordó que la llegada del gas natural a Sinaloa, a través del gasoducto que atraviesa desde el sur de Texas hasta los puertos de Topolobampo y Mazatlán, abrió una gran oportunidad para impulsar el surgimiento de la industria petroquímica en Sinaloa, y establecer así un polo de desarrollo que impulsará el progreso de todo el estado.
Resaltó el hecho de que Gas y Petroquímica de Occidente (GPO) haya sido una de las primeras empresas que decidió apostar por el desarrollo de la región en la nueva etapa marcada por la llegada del gas natural.
Después de la central termoeléctrica de Topolobampo, que utiliza el gas para sus procesos de generación de electricidad, esta empresa de origen suizo-alemán utilizará ese carburante natural para la producción de fertilizantes, con el monto de inversión privada más grande en la historia del estado.
Galaviz Lugo se dijo complacido de que por fin sea vaya a realizar la consulta indígena, y se mostró confiado en que una vez superado este obstáculo se inicie la construcción de la planta de fertilizantes de GPO.
“Esperamos en tres años estar celebrando el inicio de operaciones de este tan anhelado proyecto, que permitirá abastecer al campo mexicano del insumo base para elevar la producción de alimentos que demanda el país”, concluyó el dirigente de la Asociación de Agricultores del Río Fuerte Sur.