Nada es parabólico ni tampoco mítico; lo que seguramente podría ser, un estilo de alineación astral.
31 de octubre, día en que festejan a las “brujas” cuyas raíces provienen de un antiguo festival de los sacerdotes Druidas cuyo objetivo era de dar culto a los muertos con fines satánicos y con los cuales demostraban poder y gobierno entre sus seguidores. Parte realidad y ficción, aunque a veces la primera es superada por la segunda.
Con la llegada de los nuevos poderes al estado y a los municipios en el relevo del gobernador y los alcaldes esperemos que no sea ‘más de susto ni de cuento’, y con ello se pueda forjar una historia que sea escrita por los beneficios hechos a la sociedad, sobre todo con los más vulnerables en los rubros más elementales que se tiene que brindar por parte de la administración pública.
Gobernantes elegidos por el pueblo demostrando con ello el hartazgo de los viejos regímenes del partido gobernante en turno aprovechando la alternativa que brindara la Cuarta Transformación de probar “nuevos sabores” y olvidar las “hieles amargas” pasadas.
Sobre los próximos gobiernos se proyectan bastantes expectativas esperanzadoras de transformación y superación en alcaldías y máxime en el gobierno del estado.
Esperemos que la ‘realidad no supere la ficción’ y podamos ver cumplidas las promesas hechas en campaña que abanderaban a la Cuarta Transformación como ejes de gobierno y no como “petate de muerto” mucho menos como “máscara de bruja” para espantar, porque dicho sea de más, es en lo que se ha estado cayendo, esto en alusión a los discursos desangelados, rancios y las acciones desatinadas que rayan en lo absurdo por la falta de sesos, mismas que ya aplica el gobierno de la 4T desde el centro del país y algunos estados.
El voto de confianza ha sido dado consecuente a las buenas intenciones de los nuevos gobernantes de querer hacer bien las cosas, solo resta esperar que así se den las circunstancias.
