Hechos: Liderazgo y participación política de las mujeres

En días pasados la diputada federal con licencia, Merary Villegas Sánchez, asume la responsabilidad de dirigir los destinos de Morena, partido que se suma en colocar a mujeres en sus dirigencias.
Así como lo hiciera en su momento el PRD, el PAN, actualmente existe un interinato en el PRI; partidos que están transitando en dar espacio a las mujeres en la transformación de la política.
Mujeres que escalan escaños alcanzando liderazgos y cargos políticos de gran importancia, y con ello se prevé suban el nivel de la política en el momento de las negociaciones y repartición de candidaturas se espera que estas sean más equitativas y que tengan menos conflictos, que los hombres al momento de tomar decisiones, de transitar con tal o cual partido político, ya sea en alianza, en coalición, concediendo y cediendo espacios para poder garantizar los triunfos.
Lo que es un hecho es que entre las mujeres que son dirigentes de partidos políticos en Sinaloa, a nivel estatal, hay niveles importantes y sobresalientes de compromiso con sus propios partidos.
La pregunta sería -sin tintes misóginos ni mucho menos-, ¿Hasta dónde verdaderamente van a estirarse para ser autónomas, para ser libres en cuanto a sus decisiones? Esto en el entendido que obedecen a decisiones colegiadas, pero, si bien es cierto, hay poder tras el trono.
Los mensajes son claros, pero cuando menos se transita en ello, en tener mujeres en las dirigencias, para que a su vez, en los comités municipales, en las representaciones municipales haga lo propio pero con una repartición equitativa, para cuando el tiempo electoral llegue también la repartición sea con el mismo procedimiento.
En el caso de Morena, Merary Villegas Sánchez, llegó a la dirigencia por unanimidad, de momento algunos mencionaban su nombre de Villegas, pero cuando llegaron a la asamblea los votantes, llegaron listos y preparados con la instrucción para no tener por levantarle sombra a la diputada federal con licencia.
Villegas Sánchez, mujer con carácter y comprometida con el partido de Morena, con una lealtad a quien gobierna Sinaloa, Dr. Rocha Moya; y obviamente la misma hacia Andrés Manuel López Obrador.
Respecto a la asamblea estatal los nombramientos se darán durante los días 16 y 17 de septiembre del año en curso, esto cuando se realice la asamblea nacional donde se ve el tono ‘rosa’, lo que indica la presencia de una mujer respaldada con capacidad de tomar decisiones y emprender negociaciones, esperemos que le den soltura.
En el PAN, con Roxana Rubio, teniendo una llegada estrepitosa y escandalosa, pero parece ser que está sufriendo un ‘break’ un ‘impasse’ en cuanto a la participación política en la oposición, y se ha centralizado, se ha guardado en las paredes del Comité Directivo Estatal de Culiacán, porque al parecer para ella no existe un ‘resto del estado’ siendo ésta de orígenes sinaloítas, pero ya no se le escucha en la crítica, en la posición o en posturas, y sigue siendo una figura bajo perfil.
El PRD, poco hace, poco es visible, no se escucha.
En el PAS ya se sabe que el control lo tiene Héctor Melesio Cuén Ojeda, y quien ponga o disponga él seguirá operando el mismo partido con todo y lo que ha echado a perder en cuanto a alianzas, particularmente con el partido de Morena.
En el partido ‘naranja’ donde está Sergio Torres, no se ve la posibilidad de que pudieran denominar a una mujer para la dirigencia estatal de este partido en Sinaloa, pero este sigue transitando y parece una herramienta útil al actual gobierno estatal para tocar temas importantes, relevantes y contundentes que den una ‘sacudida’ a la conciencia política y, aunque no hay un valor creciente contundente y visiblemente importante, ‘ahí anda’ Sergio Torres haciendo escándalo.
Del PT, ya ni comento, parece que ya no existe en Sinaloa, partido que tuvo un dirigente que la única visión que siempre ha tenido es: ser primero él, siempre él y nomás él; Leobardo Alcántara Martínez, hoy diputado federal, por fortuna de la ‘ola’ de Morena.
Poco a poco se irán alineando los astros y clarificando las dudas sobre la posibilidad de accionar de cada una de las mujeres y hombres que están en el poder, lo que sí, es que se han dado cuenta de que hay gobierno en Sinaloa y que no solo en la gobernabilidad del estado, donde está inmerso Rocha Moya, sino que también parte de esa gobernabilidad es transitar con influencia en los partidos políticos para llevar su ‘nave a buen puerto’.